Hace unos años concursé para el puesto de Jefe de Sistemas y Comunicaciones de la Legislatura de la provincia en la que vivía, a instancias de un alto funcionario de ese Poder, quien se enteró que tenía ese cargo en la industria privada y me invitó.
Me felicitaron por el currículum y, llegado el momento, hasta se me aseguró que no tenía contendientes del mismo nivel. Algunas personas de mi entorno se ofrecieron a mediar con "padrinos artísticos" para favorecerme pero se enojaron bastante cuando me encogí de hombros y no fui a las entrevistas de rigor (que nada tenía que ver con la Legislatura, debo agregar), me negué al besamanos oficial y ni hablar de la negociación de toma y daca.
Entonces, no me extrañó que un muchacho recién recibido, con su foja de servicios en blanco, haya sido el elegido. Sé que las leyes obligan a concursos (de antecedentes, de precios, licitaciones) que necesitan relleno para justificarse: hay que cumplir con un mínimo de presentaciones o declararlo desierto. Por eso se me invitó. Por lo menos, no soy tan ingenuo y nunca me hice ilusiones, aunque me molestó ser parte (y, sobre todo, tomar conciencia) de un hecho corrupto sin tener nada que ver.
Bueno, hace un par de meses -recién me entero- el muchacho está entre rejas: "intervino" las cuentas de e-mail de la oposición en las Cámaras, lo pescaron in fraganti y, puesto en la obligación de renunciar (otros vientos políticos soplan en las Cámaras ahora, parece, y los padrinos desaparecieron) hizo la que hacen todos los imbéciles de Sistemas cuando se ven en problemas: amenazan con llevarse las claves, configuraciones y otras tantas cuestiones que NUNCA debieran estar en poder de una sola persona (más si es un Poder del Estado Provincial).
Bueno, los legisladores no se asustaron y decidieron aceptar el golpe: lo acaban de denunciar ante la Justicia Federal. Buscan generar el primer antecedente de jurisprudencia en la materia. Está claro que el muchacho obedeció órdenes, y que la intervención de las cuentas de mail es un hecho político que debe ser revisado en otros niveles. Pero protegerse con una extorsión que excede lo anterior -y que llevó al virtual (¡má qué virtual!) colapso del sistema informático de las cámaras- será juzgado junto con el espionaje digital. Se le imputan todos los costos de recuperar los sistemas, y la cuenta es grande (¡sobre todo si la administra el Estado!), más un cargo específico: "responsable por la vulnerabilidad de los sistemas".
¡No sabía que esto de hurgarme las uñas de los pies en la vereda iba a tener alguna recompensa! Dime con quien andas...
Me felicitaron por el currículum y, llegado el momento, hasta se me aseguró que no tenía contendientes del mismo nivel. Algunas personas de mi entorno se ofrecieron a mediar con "padrinos artísticos" para favorecerme pero se enojaron bastante cuando me encogí de hombros y no fui a las entrevistas de rigor (que nada tenía que ver con la Legislatura, debo agregar), me negué al besamanos oficial y ni hablar de la negociación de toma y daca.
Entonces, no me extrañó que un muchacho recién recibido, con su foja de servicios en blanco, haya sido el elegido. Sé que las leyes obligan a concursos (de antecedentes, de precios, licitaciones) que necesitan relleno para justificarse: hay que cumplir con un mínimo de presentaciones o declararlo desierto. Por eso se me invitó. Por lo menos, no soy tan ingenuo y nunca me hice ilusiones, aunque me molestó ser parte (y, sobre todo, tomar conciencia) de un hecho corrupto sin tener nada que ver.
Bueno, hace un par de meses -recién me entero- el muchacho está entre rejas: "intervino" las cuentas de e-mail de la oposición en las Cámaras, lo pescaron in fraganti y, puesto en la obligación de renunciar (otros vientos políticos soplan en las Cámaras ahora, parece, y los padrinos desaparecieron) hizo la que hacen todos los imbéciles de Sistemas cuando se ven en problemas: amenazan con llevarse las claves, configuraciones y otras tantas cuestiones que NUNCA debieran estar en poder de una sola persona (más si es un Poder del Estado Provincial).
Bueno, los legisladores no se asustaron y decidieron aceptar el golpe: lo acaban de denunciar ante la Justicia Federal. Buscan generar el primer antecedente de jurisprudencia en la materia. Está claro que el muchacho obedeció órdenes, y que la intervención de las cuentas de mail es un hecho político que debe ser revisado en otros niveles. Pero protegerse con una extorsión que excede lo anterior -y que llevó al virtual (¡má qué virtual!) colapso del sistema informático de las cámaras- será juzgado junto con el espionaje digital. Se le imputan todos los costos de recuperar los sistemas, y la cuenta es grande (¡sobre todo si la administra el Estado!), más un cargo específico: "responsable por la vulnerabilidad de los sistemas".
¡No sabía que esto de hurgarme las uñas de los pies en la vereda iba a tener alguna recompensa! Dime con quien andas...
Ahí tenés!
ResponderBorrarEs que, el que mal anda, mal acaba.
Y el que a hierro mata, a hierro muere.
Y no por mucho madrugar se le ven mejor los dientes a los caballos regalados, que mejor que no sean hermanos porque se los devoran los de afuera.
Perdón, soy un niño, sólo quería poner el primero... perdón.
S.
Como me recuerda a tantos concursos de antecedentes para Docente Auxiliar, Jefe de Trabajos Practicos, Profesor Adjunto, Profesor Asociado y Profesor Titular de la Universidad de Buenos Aires...y aun no habia tantas "herramientas virtuales"...
ResponderBorrar¡qué placer, qué placeeer!
ResponderBorrarreconozcalo don F. ¡qué placer!
qué se joda, por payaso, por acomodado, por falta de criterio, etc etc etc.
jejejejeje
Ah, el karma es un inevitable aliado... y un implacable perseguidor.
ResponderBorrarS.: Vio cómo es usted!
ResponderBorrarminombre...: la bronca que uno se agarra de laburar gratis!
Fod.: jijiji
Cass: tal cual, soy un convencido.